lunes, 31 de enero de 2011

MI RAIZ...

Entre luces y destellos siempre te veo…eres como un reflejo que alumbra mis tormentos.
Te siento en todos los momentos  de llantos derramados y te siento más viva que nunca en los gozos inesperados.
Me crié contigo y si pongo un poquito de empeño soy capaz de oler tu perfume de rosas de viento.
¡Cuantos consejos!... cuantas charlas que ahora son mi sustento.
Cuantas palabras dichas de cama a cama en esas noches de cuenta cuentos.
Cuantas miradas perdidas en sombras sin retroceso.
Pensé que serias eterna y con ese pensamiento te dejaba hablando y me escapaba a los brazos de Morfeo.
Lo que daría hoy por escuchar tu voz, por sentir un solo instante tus manos dándome calor.
Y no evocarte a mis cuatro décadas más cuatro años y sorprenderme llorando como una chiquilla al contemplar tu retrato.
Que belleza por fuera y cuanto amor por dentro.
Nunca me ha dolido tanto nada, que mirarte en esa cama, tus ojos cerrados… tu piel blanca.
Nueve estrellas de oro pasaron de tu dedo al mío… un amuleto que me protege ante mi propio destino.
Y siento tu voz guiándome por estos caminos perdidos. Susurrándome al oído… tranquila mi niña, siempre estaré contigo.
Un brillo de alba sobre mi hombro prendido.
Dos alas blancas cargaditas de rocío y una estela en el cielo con el nombre más bonito…

Dedicado a mi abuela…Rosa Paoli Fossi, la raíz más profunda que me enseñó a soñar.

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

3º DUETO...PEREZ CRESPO/ SALINAS. BUSCANDOME EN TI/EXISTENCIAS.


Sin costuras y desnuda a ti me entrego, a tus manos, a tu ojos, a todos tus momentos.
A la oscuridad de la noche y las profundidades de tu cuerpo, al fluir de tu cascada, a ser movimiento eterno.
He traspasado la barrera de tu epidermis y nado sola y rápida por tus adentros, me licuo con tu sangre y me alimento de cada glándula de tu santo universo, he descansado en el rincón de donde todo nace y al compás del ritmo sereno, me ha adentrado en la fábula de tus pensamientos… en tus deseos, en esa masa latente que sustenta el crecimiento,  imaginando ser parte creciente de esos mundos de sueños, ser la portadora de la flor mas blanca que emana paz y sentimiento...y por mas que he buscado no me he hallado  en ninguno de ellos.
Y ante la soledad de ser fluido… acurrucada en un rincón de tu humano equilibrio,  me pregunto... ¿alguna vez he existido?

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

                                                 He recibido tu carta…Escribes de tus viajes
                                                 Excursiones a mis adentros
                                                 Sin equipaje por desnuda
                                                 Cegada en tu entrega…

                                                 Desde bellos amaneceres,
                                                 A preciosas puestas de sol
                                                 El fluir de mil cascadas en color
                                                 Movimiento eterno por amor

                                                 Has hecho noche en lo más alto
                                                 La montaña que son mis pensamientos
                                                 Visto el lago tranquilo, en su calma
                                                 También las  olas crecidas por el viento

                                                 Perdida en este cuerpo te siento
                                                 Buscando alimento y sustento
                                                 Tú que navegas por mis venas
                                                 Dudas de tu existencia en soledad

                                                Tú mi amor, amor puro y nada mas
                                                Hay un solo cuerpo, un solo rincón
                                                Un solo pensamiento y una única flor
                                                Yo seré el tallo que te eleve, veras el sol

                                                Mía en alma, un solo cuerpo
                                                Mi corazón, nuestro latir.
                                                Existimos

                                                    *José Manuel Salinas*
                                                             *D.R*

CUANDO ERA ALGUIEN....

Música… tus notas me acompañan en mi andadura por estos parajes desolados que me embotan la razón y condenan mi alma.
No recuerdo con precisión el último día que olí una flor, ni tan siquiera recuerdo de que color es el cielo, si azul o negro.
Más tus sonidos quedaron perpetuos… y en la amargura de mi soledad puedo entonar de memoria las notas en su escala magistral. Es como una lluvia fina que sincroniza mis movimientos… danzarines y radiantes, con esos balanceos que provocan en mí una sonrisa  flamante.
Camino sin saber donde voy, hace demasiado tiempo que el polvo cubrió las veredas y esa nube oscura apago la luz de los valles y dejó seca toda alma viviente que se paseaba erguida por esta tierra.
Entre las llagas emanando sangre y pus me muevo. Sin rumbo… sin saber donde terminaré mañana… más tus sonidos me acompañan. Y me hacen evocar aquellas curvas de tu espalda… tan generosa y tan salada. Tus ojos mirando serena la tarde de aquel otoño que te hice prisionera. El banco del parque cubierto de hojas secas… en colores perennes de naranjas y violetas.
Tus manos blancas de uñas sonrosadas acariciando mi cara y haciéndome sentir el hombre más importante del planeta, tan solo por ser tuyo y que me quisieras. El día que levanté tu falda… y tu mirada entre avergonzada y somnolienta, como intentando que mis manos se parasen sin querer que lo hicieran. Tú bendita entrega… el cuerpo desnudo de la mujer más bella.
Los colores de tus carnes y el sabor infinito de tu boca tierna. Realeza pertinente de unos recuerdos que solo están presentes cuando consigo entonar los acordes de las corcheas… después todo es polvo marengo que cubre hasta la reminiscencia más grata, la más añorada.
Derogar quisiera todo lo vivido en estos años de asedio. Y volver a las noches serenas con mis dedos tocando las nacaradas  teclas y observando tu baile en singular destreza.
Después de la tormenta solo quedamos un puñado de imbéciles contemplando lo que queda… que no es más que muerte enferma y delimitados laberintos de penas.
Ojala me hubiera llevado con ella. Y no dejarme mutilado en esta infértil gleba que nada da y menos deja.
Muerto de frío y de angustia, vago como un ente sin alma… solo me hace humano  el sonido calido del compás de la  música y la evocación sagrada de tu mirada de seda.

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

LA LEYENDA DE ANA...

Ella encajaba en los sueños de alguien…más nunca descubrió en el corazón de quien.
Sus años fueron pasando mientras sola y con ramos marchitos, esperaba su tren.
Le habían contado que no tuviera prisa, que el momento llegaría dotándola de tal alegría que no recordaría ni la espera, ni la melancolía.
Y se mantuvo quieta en el andén.
El vestido blanco se tornó amarillo y sus cabellos dorados cambiaron su brillo. Su piel  adquirió otro tono más dormido.
Pero sus ojos miraban con la esperanza ilusionada de quien ve siempre amanecer.
Se acostumbró al sonido de las ruedas sobre los raíles y también a ver pasar vagones cargaditos de sonrisa de papel.
En cada enganche una flor prendida, dos almas unidas que desde la ventanilla le dejaban el saludo mas radiante entre flechas y sedas de rojo salvaje.
Y fueron pasando los soles y las lunas otoñales… siempre con la esperanza de picar su pasaje, pero fiel a aquella creencia de ser descubierta por la realeza más bella que jamás conociera.
Una mañana de calida primavera una mano se posó en ella…lentamente giró la cabeza y observo serena su propio reflejo en unos ojos morenos de excelsa candidez.
- ¿Eres tu mi tren?
- Yo soy lo que tú quieras que sea, el verde más primoroso o el rosa pastel.
- ¿Y a donde me llevas?
- A las nubes más altas, donde descansa el viento y acoge en su seno a cualquier ser.
- ¿Y seré feliz allí?
- Donde hay paz siempre hay dominio. Y un corazón como el tuyo tiene su sitio entre los grandes caminos de un firmamento encendido.
- Pensé que no llegarías nunca.
- Lo se,  la paciencia tiene su don. Abrázate a mí con todas tus fuerzas y notaras como llegas al más dulce resplandor.
Y una luz iluminó el banco donde siempre esperó, cansada de ver pasar trenes llenos de amores sin condición… y un aroma quedó prendida para siempre en la estación… dicen los que allí vuelven que de lilas y malvas te envuelve el olor y una sensación extraña te recorre el interior, es como si notaras el amor más puro en el centro justo de tu corazón.

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

UN DIA MAS...JOSÉ MANUEL SALINAS.

QUIMERA...


¿Qué te pasa?
Que tu rostro se ha tornado opaco y ya no brota la expresión de júbilo en tu mirada…las monedas de la fuente de los deseos parecen ahora manchadas, óxido en sus cantos y caras difuminadas…te pregunto con palabras de enamorada y solo tengo como respuesta un nada. Un nada que se hace profundo en mi pecho, dejando secuelas de amores inciertos, pensando donde he fallado o que sentirán tus latidos cuando me miras asombrado. Asombro que me lleva  por  malos presagios, de aquello ancestros que decían que el pecado es pagadero con lo mismo que se avala, con el beso de la amargura y un corazón hecho una bola de angustia y agonía...Agonía de no ver tu risa y pensar que soy la portadora de tus desdichas, esas que velan los ojos y dejan calvas las retinas, infértiles moradas del almas dormidas como sueños imposibles guardados en el desván de las rutinas…Rutina que me hace volver cada día a tus brazos, desde el regazo de tu vientre sosegado al más puro beso en tu mejilla, para abrir los recuerdos y decirte de nuevo…¿Qué te pasa, vida mía?


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

sábado, 29 de enero de 2011

CRISALIDA...

De tanto como albergaba dentro, olvidé mirar afuera. Omití  al ser humano y la gran aventura que eso conlleva…desterré, ante el dolor, antes las dudas, la soberana apariencia, me encerré en mis mundos de leyenda siendo de nuevo quimera.
Paseé noches enteras entre lucernas de aceite con mariposas danzando al compás de mis caderas,  por esos senderos de oro formados a mi antojo  repletos de  madreselva, moradas de mundos perdidos que solo habitan en mi conciencia…meninges exprimidas por encontrar la realeza, las preguntas sin respuesta, el olor acaramelado de la infinitud empírica donde se halla el enunciado  atávico de lo absolutamente divino...el amor sin mácula…la dulzura en estallidos, la serenidad danzando… el pesar dormido.
Más alcancé a asimilar que la luz mas hermosa es la del sol en las mañanas, que en las noches ya tenemos platas para marcarnos las zancadas….que sin la contraposición no se saborea igual una victoria, o sencillamente una retirada. Porque por más mundo de ensueño como la realidad no hay nada…que el dolor te mantiene viva y con la razón revelada… que la verdad absoluta la tenemos en la mirada, el hombre con todas sus locuras y el mundo para realizarlas…y en un crepúsculo de llanto impío, apagué la lucerna, dejé de ser quimera y me transforme en una mujer liberada….


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

viernes, 28 de enero de 2011

APOSTANDO AL AMOR...

Mis manos acariciaron tu rostro…sereno, suave, lleno de opulencia. Me instruí en  la textura de tu piel, los pliegues armoniosos de tu cuerpo bailando en aquellos sueños etéreos…sin formación ninguna, fui maestro.
Adorné tu pelo con mil sonrisas, desde el pubis a la cabeza, fue una brisa que solo alcanzó a viento fresco cuando el sol calentó mis pupilas y brotó como una corriente la vehemencia silente, pausada, sin prisas, coronándote entre el resto como mi único regente.
Te dediqué horas enteras, sin relojes marcado tiempos de espera, encontré lo que resta en las caracolas que traen sonidos de olas, cresta de sal y olores de algas muertas…y fui más tuyo que ninguno, por conocerte y adorarte, entre sabanas de fino lino y dos corazones unidos llegamos a la cima de los montes del olvido, en ellas nos perdimos ofreciendo al dios del ocaso  un momento divino.
Y alcanzamos la madrugada callados y recogidos…yo te miré asombrado, tu lo hiciste reprimido…yo te dije te amo, tu soltaste un suspiro, yo besé tu boca, tu te abrazaste a mi ombligo y un susurro que me llego como un grito dejó mi cuerpo inerte y el tuyo sometido. Aposté por el amor y el amor me ha vencido…

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

jueves, 27 de enero de 2011

TROZOS....JOSE MANUEL SALINAS.

NECESITO SOÑARTE DE DIA...

Ungiré con mi lamento tu espíritu  para ahormar mi narcosis al silente soplo de viento; entre velos de inciensos que quiebran  la brisa, la noche usurpa mi fatiga.
Me apodero de nuevo del candil de tu vehemencia, de tus labios brincando en gestos  de niña,  para descubrí un poco más hondo, la sombra que me lleva a la tenue estampa teñida en atezadas  blondas perpetuas,  en mortajas dormidas…y bosquejo  unas dehesas  en mis retinas, con el vítreo prensado ornamento el presente  dándote vida, entelequia que me sostiene aferrado a tus manos al saberte perdida…
Pero mientras me quede un halo de vida, el pretérito   exacerbará  mis tripas concitando dos momentos que para mi fueron cenizas…manumisión le pido al cielo para sofocar la herida,  que quema como tósigo cariando el sostén que yergue  mi cuerpo, matando la dicha de una leve sonrisa, efímera, diluida…mi presente, mi futuro en tu boca dormitan. Viéndote te sueño cada noche, sin verte despierto con el día y al desvelarme permuto mi alma en una plegaria sofistica  para yacer perpetuamente encima de tu inerte umbría, confortando mi aflicción  regreso al anhelo de no despertar algún día…para soñar y seguir soñando como en sueños son los sueños de sentirte viva…

*Rocío Pérez Crespo*  
Derechos Reservados

miércoles, 26 de enero de 2011

CAPRICHO DE DIOSES...

Sin ser como quieres que sea, soy el mismo. Sin medir mis pasos de cerca, sigo contigo.
Porque mis formas o mis maneras nacieron conmigo y si me tienes que amar hazlo tal cual, sin compromisos, sin miradas de soslayo… sin pergaminos.
Que la diferencia solo radica en las mentes dormidas. Si hombre con hombre es faltar… amor por amor es pecar.
Más sigo siendo sombra y vida desde mi raíz hasta mi eternidad. Que mis ojos lucen lo mismo ante la entrega que ante la ofrenda de la adversidad y si nacido en  épocas  de epopeya hubiera sido capricho de dioses… lo he hecho en esta Era donde no se reconoce ni la templanza, ni la decencia…. Ni tan siquiera la sinceridad.
Amar no es convencer al mundo de mi normalidad, es sencillamente entregar un alma a mi igual… más tu solo ves error por no ser mi compañera una costilla de Adán… sino el mismo Adán convertido en mi literal.
Y pides explicaciones que no te puedo dar… solo mi esencia entregada sin más. Que como bien dijo un sabio, la naturaleza se resiste a ser clasificada… no me clasifiques tu por no comprender mi bonanza.
Ni veas miedos o fantasmas… ni avernos  oscuros por compartir una cama. Que no  soy demonio, pero  tampoco santo con tiara… solo soy una persona enamorada que mira con esperanza el mismo camino que tú andas.
Mas si por ello me tienes que clavar una lanza…adelanta un paso y clávala bien centrada, que por lo menos tenga constancia de quien es la mano que mata.
Y después date la vuelta por ser cerrado de testa… mas no justifiques tu indolencia con mi supuesta  anormalidad, ya  que eres solamente tú capaz de visualizarla sin más.
Por no comprender a tiempo que la amistad es serena y pura…independiente en fondo y postura a quien comparte mi lar.

*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

Para ti Rafa…. Mi amigo… en tu cumpleaños, estés donde estés.

GRAVAMEN...



Las puertas se volvieron a cerrar, la mácula impresa en mis sesos cubrió como un nido infecto cada molécula de este maltrecho elemento…sin respiros, ni razones…sabiendo que el gran segmento se unifico a mi estado antes la falta de seguridad y el baldón de la capacidad, mermada por el frío glacial de su mirada.
Sucumbo como una fiera herida ante la palabra, la explosión de mil descargas en mis entrañas…la angustia, la desolación, la falta de fe, ganan las batallas y van consumiendo este cuerpo que a nadie engaña.
Retrospección hacia la nada, hacia el vacío cóncavo de una extraña madrugada, pusilánime categórico que estalla como un especto muerto en mi cara, dejando revelado lo que atesoraba …pavor a ser abandonada.
Como un cliché se me ofrece, repetido tantas veces que en la memoria se pierde, como se pierden los motivos cuando el raciocinio no crece…ante la verdad evidente, me sumerjo de nuevo en el quimérico mundo que invento, esperando vivir con la soledad que prefiero y quitar toda huella de esta que me mantiene…


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*

LABERINTOS....


Abisal oquedad que nunca cerrará, requiebros que saben a yeso, consumación de ambigüedad…vocablos que no se ajustan a la verdad, a unos hechos definidos que saltan por encima de la equidad.
La conclusión toma el mando intentando poner orden en el atolondrado marco, sin conseguir más que un detalle amarescente que prolonga la cruda  realidad…sin sueños que alimentar, como nubes fatuas  que nada pueden descargar, solo encapotar un cielo azul turquesa para dejarme desecha y apagar el último rayo de voluntad.
Como velas titilantes que van alumbrando espacios pequeños para luego terminar en su propia flama, oprimidas un una mancha mate, volviendo otra vez a la oscuridad.
Y busco una salida para poder volar en paz, sin abdicar en lo que anhela mi alma, que no es otra cosa que un poco de tranquilidad. Que la conjugación sea coherente entre acción y reacción. Que no me quede mirando, con cara de estupor, como dices amarme y no encuentre ese amor.
Conocerte, es ser erudito laureado, más yo, soy solo un ser profano que entiende de sentimientos y amores desbocados…que sabe de entregas nacidas en los regazos de las caricias perpetuas que nacen de mis brazos…y cuando digo te amo,  del dicho al hecho no hay diferencias que trastoquen lo pronunciado. El recuerdo, como todo, es relativo…se puede desvirtuar en los recodos del misticismo, pero… la demostración de una obra es una prueba irrefutable que nunca da píe a la barahúnda de lo acontecido.
Quiero sentir de tus labios el mismo latir de tu pecho y sentarme entre los pliegues de tu piel con la tranquilidad que da entender, que amar no es más que ofrecer lo que nace de un puro sentimiento…



*Rocío Pérez Crespo*