domingo, 30 de septiembre de 2012

RESCATANDO ESENCIAS...


Soy lectora nata y, desde que sujeto el libro  que voy a leer entre mis manos, empiezo a sentir que me adentro en una nueva aventura, sea de la tematica que sea. Eso es lo de menos. Me gusta, me hace sentir acompañada, rodeada, protegida...pero, lo que más me gusta de todo, es chocar con trocitos que de verdad alimentan mi alma. Y los libros siempre lo hacen.
Hoy, me ha vuelto a ocurrir mientras me tomaba un café en una terracita de las que considero "mis favoritas. Igual no os dice nada o quizá, como a mi, os lo dice todo...

- Guarda el alma más que nada...No vayas a perder lo que más vale por ir a perseguir vientos. Cuídate de la vanidades, sujeta la sensualidad, modera el amor propio, encomiéndate a Dios, la Virgen, los Santos...

EL CAUTIVO.
Jesús Sánchez Adalid.

BLOG AMIGOS...

Sé, que algunas personas que entran a este blog "Desde los silencios" gustan de las poesias que suelo poner en la parte derecha del mismo.
Ahora, si os dais cuenta, os he puesto algunos blog amigos. Es solo cuestión de clicar sobre el enlace del blog que más os agrade  y estaréis dentro.

Disfrutar.

Besos.


FELIZ FIN DE SEMANA...



Esta va dedicada. A ti, que de vez en cuando te pierdes, como me he perdido yo tantas veces.
Si consigues trazar la linea te invito a cantar conmigo...dale, nada es tan complicado como parece.
A mi Rosa.

sábado, 29 de septiembre de 2012

A ESE AMIGO ETERNO...






Una campana repica en el viento, eco dormido,
el sonido lejano y reconocido del añejo metal.
Busco el aliento divino, sesgado en minutos de cristal,
pan ácimo en mi boca, pétalo roto en un último gemido.


Comprimidos en un frasco guardó mil secretos…
Mi fe, mis esperanzas…mis sueños gastados, muertos.
Y al levantar estos ojos agotados y sin embargo abiertos
me choco con la cruz que guía estos pasos sujetos.

Me reflejo ante tu forma inerte y marmórea
en el sufrimientos de los ángeles que velan tu suerte…
Dorados querubines de inquebrantable mirada solerte
como un corro férreo ante tu sangre corpórea.

Queda la promesa suspendida en el aire, como una pluma,
en el rojo fulgurante de la vidriera, liviana luz que penetra…
Y adormece el sentido de esta penitente que a tus pies se muestra,
cansada de andar cien caminos para yacer reconfortada en tu eterna bruma…


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*


De vez en cuando necesito recordar el por qué de tantas cosas pequeñas que ennoblecen, que agrandan, que quedan, que son, que marcan, que...que laten.


YO, TE...







Llamas mi atención sin pronunciar mi nombre.
Perdido entre velos, dejas tu presencia adivinarse en el viento. Como esas tardes serenas donde el firmamento se pinta de colores arabescos y una paz recorre mi cuerpo con la certeza palpitando en las venas, de que tus pies abren mi sendero. Te siento albero, verde, naranja intenso…eres duna, oasis, palmera y desierto.
Vida, pura vida que entra en mi pecho acortando los confines de mis secretos...
Me sabes a uvas, a miel y a enebro…a  crepúsculos de primavera donde el azul se hace más intenso y, flota en el aire los longevos augures de las varitas de los hechiceros, trayendo en sus presagios lo cierto, lo cabal…lo auténtico.
Ilusión, inocente ilusión que penetra y deshace todos los nudos de mi razón…
Me haces libre en una espiral de sueños, forjas algodones con tus dedos, me descubro aprendiendo que las nanas más hermosas nacen de tus flecos y que esos flecos son pequeñas agujas que me cosen a tus derechos, a los pliegues de tus caricias, al robusto significado del verbo, quiero…


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*

martes, 25 de septiembre de 2012

ME DUELES...




Ahora, cuando la distancia se hace visible y soy capaz de fijar los kilómetros, me doy cuenta de las pocas personas que me echan de menos. Decir que no duele, es una mentira. Reprimir una sola lágrima maldiciendo lo estúpida que soy, un atentado contra mi dignidad.
Si pudiera vender el silencio que me rodea, la absoluta certeza que me abruma, posiblemente limitaría la frecuencia de esos ecos que me llegan cargados de recuerdos, de risas, de para siempre. 
La caducidad de mi propia historia empieza hoy, en el mismo momento que hago de mi realidad, un espejo donde mirarme, donde proyectar el fino y delicado rictus de la ironía. Una hermosa máscara que disimula de puertas para afuera el oscuro halo que me rodea.
Si acaso he llegado a ser importante para alguien, la omisión y la falta de transparencia han hecho callos en mi conciencia, convirtiéndome sin darme cuenta, en un incrédula recalcitrante que no es capaz de ver la franca ternura de una mirada, cuando esta va dirigida directamente a mi corazón. Escéptica ante la verborrea barata que radica en los cumplidos rutinarios de aquella persona que no es capaz de verme o que yo creo que no me ve y, que sin embargo,  me son tan necesarios como el aire que respiro.
Supongo que decirme mil veces más mil que no tengo fe, es una falacia que me invento para no admitir que entre un mundo entero, solo a ti te necesito, solo por ti rompo el viento y en ti, viajo a esos espacios donde las mariposas dejan de ser bichos para sucumbir al mágico estado de los colores. Y, que el camino, escabroso, cargado de árboles centenarios sin hojas y secos que tapan el horizonte, que oscurecen el cielo; es mucho más liviano cuando noto tu mano sujetando fuerte mi cintura y esos labios diciéndome despacio o deprisa, o entre risas, o con el ceño fruncido, o como sea…eres y serás la leche, la persona que más me irrita, la que me saca de mis casillas con una facilidad pasmosa y a la que quiero un rato más en mi vida.





*Rocío Pérez Crespo*
Derechos reservados

sábado, 22 de septiembre de 2012

CERTEZA...




Eres, el mejor recuerdo de mi memoria. La mejor canción de mis mañanas, el sonido más perfecto de mi corazón.

*Rocío Pérez Crespo*

domingo, 16 de septiembre de 2012

NUNCA ES SIEMPRE...



Tres palomas a sus pies agitan sus alas, una lata de cerveza caliente descansa en el suelo, un cigarro a medio consumir amarillea un poco más sus dedos y esa especie de halo oscuro sobresale a borbotones por encima de sus hombros.
Suenan las campanas de la iglesia, es domingo. Levanta la cabeza, hundida  desde hace siglos, y mira hacia arriba, posiblemente intentando hallar su destino.
Una arcada se queda parada en mitad de la traquea y, el asco aflora por todos los sentidos, tanto, que hasta las hojas de los árboles sacuden su pecíolo con una brisa inexistente que trae el aroma del terrible vómito. 
Sensaciones, rumores vencidos, momentos que son momentos, trozos de recuerdos bailando con sones prohibidos. No tienes derecho…ella no volverá contigo.
No hay camino, ni espacio, todo queda reducido a un estado aletargado de laberintos. Esquinas y más esquinas doblándose así mismas, sin dejar visión de horizontes o de simples llanuras.
Sus ojos no están vacíos, sino lleno de interrogantes. Quizá asumiendo la soledad impuesta y dejando atrás aquellos días de soledades deseadas. Donde al contemplar su casa tranquila, le invadía  un alivio cargado de esperanza. Hoy, será hoy, el mañana es infinito.
Ahora, de banco a banco, de mirada a mirada, un escalofrío recorre mi espalda con la sensación golpeando en alguna parte y, preguntándome, que tuvo que ocurrir en su vida para consumir hasta el delirio la poca dignidad pegada a su ombligo. Qué sino marca el límite entre lo real y lo real más podrido, qué mácula obstruye el absoluto dominio. Por qué el mundo se paró para él y nadie reparo que el fango de la desidia, lo atrapó con sus garras brunas,  un fatídico cinco de julio.



*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*



VALENTIA...




No me llaméis  soñadora, porque vosotros viváis en una absurda farsa.

*Rocío Pérez Crespo*

viernes, 14 de septiembre de 2012

CUANDO NO SIENTAS NADA...




Si dejo de ser algún día, prométeme que tu voz se hará escuchar. Que no seré tierra yerma en un campo olvidado donde los arados dejaron de surcar. Ni rosal sin flor, ni sauce sin rio.
Si ves que ya no sientes cuando pronuncias mi nombre, ni el sueño lleva implícito mi recuerdo, no dejes que me de cuenta a tiempos completos, enorgullécete del cromosoma que te hizo hombre y hazme saber cual es tu sentimiento.
Si lo que empieza tiene que terminar –rara razón que aplicamos los humanos, pues el mundo no termina con esos horizontes planos- que sea con el honor suficiente y la gallardía necesaria, para poder decir adiós sin lágrimas en los ojos. Que sea con la cabeza levantada mirando al futuro y dejando que el corazón se expanda libre por las aristas de lo cumplido
Si alguna vez al mirarme sientes vacío, no me regales posibles, habla conmigo. Pues la compasión por amor debido es tan dolorosa como el aparentar que todo sigue en el mismo camino.
No quiero ser lastre, notando cada mañana que el beso no es querido, ni cada noche al acostarme el roce frío de tu cuerpo herido. Despréndete de la carga innecesaria, ennoblece mi apellido.


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*

jueves, 13 de septiembre de 2012

CLAYTON PONTES...




Clayton Pontes nació en Fortaleza, Brasil.

 Mediante el color y las texturas; las pinceladas, las luces y las sombras se crea un mundo entre lo real y lo mágico donde uno se pierde en las profundidades de la tela como en un cuento de hadas.
Matices que claman y formas que crecen antes unos ojos observadores que se recrean en esos rosas del atardecer, los verdes que brotan frescos, los eternos azules… en el viso más extenso del maestro.
Los oleos de Pontes son capaces de hacer latir un corazón. La suavidad y sobre todo la seguridad con la que plasma la idea, es magistral, sin duda alguna tanto su pintura como su escultura, son obras de arte hechas con alma y para las alma. Adorable en formas y fondos, creador incansable,  sumamente humilde en su tarea, hace y consigue crecer su talento como una ola al romper contra el acantilado, impactante, llena de vida, de poder, de esa corriente que salta de la obra al espectador haciéndola tuya y eterna.


lunes, 10 de septiembre de 2012

TÚ, SIEMPRE TÚ...






Serán necias mis palabras y, acaso
un algo ridículas, sin base donde apoyarlas,
sin certezas donde construirlas.
Me arriesgo hasta el límite razonable,
hasta el punto distante del retorno
y  con serenidad absoluta, expongo mi alma.
Sí…
Hoy la dejo al descubierto, quizá,
porque ando un algo cansada.

Así que, te diré:
Acércate y escucha… ¡ven!

Es por ti y en ti cada beso que doy al aire,
Cambiando imaginación por realidad,
invocando tus ojos dulces e infantes.
Sabiendo que es un imposible
no puedo dejar de soñarte o no quiero, algo es…
Me niego a dejar de amarte.

Cada ilusión envuelta en madrugadas,
me trae la esencia de la mágica noche,
esa que vestida de azul cobalto
tradujo sin recatos lo que las bocas callaron.

Ya estaban ahí  nuestros corazones dialogando,
en un idioma que se convirtió en miradas
y atravesó mi piel para llegar a mi alma.

No pienso romperme las vestiduras
en disimulos y recatos, ciertamente estoy vencida.
Así que, aun sabiendo que no soy, ni llego a serlo,
Te regalo:
Todas las risas del mundo guardadas en una caricia
y que esa caricia  toque tu frente y te devuelva la vida,
el color, el sabor, la historia reprimida y,
alguna lagrima de dicha que corra por tus mejillas.
Te doy la libertad y la cometa, el celeste más templado,
lo mejor de mi conciencia.
Y si ves que es poco, pronuncia mi nombre
y un halo de amor, coronará tu cabeza.


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*




domingo, 9 de septiembre de 2012

ESPIRAL...






Cierra la noche sus ventanas dejando en su interior el aroma de los sueños, un cacho de luna cosida al cielo y esa  pequeña estrella suspendida en el deseo que pugna diariamente por seguir viva. Latente.
Sobre los tejados aparece el día volcando su color sobre las antenas dormidas, los ojos se abren, las bocas espabilan y un halo de luz se  tragar la melancolía…
Empieza la jornada olvidando quienes somos. Una taza que se estrella contra el suelo, un chocar de platos viejos. Las cisternas cantando a su mañana, el pan tostándose en un agujero.
Mermelada o tomate.
Las mismas prisas, los idénticos ruidos, el similar estorbo.
El jodido ascensor que no llega, el reloj agitando sus saetas, los buenos días dados por inercia, los antónimos asomando con destreza.
El bostezo alegre del niño, la histérica voz de su madre, el calambre en el estómago, el autobús silente de los  pensantes.
Calles y más calles, todas iguales, todas sin pertenencia. Sonrisas de medio lado, callos en los zapatos, columpios callados, el claxon de un tarado, rojos intensos danzando… Espejismos de seres humanos.
No vemos, no escuchamos, no sentimos,  no amamos… No hay tiempo, no.
¿Y luego?...



*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*

viernes, 7 de septiembre de 2012

ME SIENTO ELIPSE...




Los pájaros perdidos del ayer,
aquellos que huyeron sin sentido,
absorbidos por las brumas,
aparecen por el flanco de la nube,
que le da techo a la casa de las sombras.

Veo la bandada llegar,
desde la ventana del olvido.
Plumas amarillas brillan en la nada
La nada…
Desde la cabeza a los pies
me siento como una elipse,
con dos vectores que salen de mi ombligo,
soy materia, pura y vulgar materia.


Mi voz se despliega en el aire
y de mis entrañas brota con rabia
la palabra que se desgrana en mi boca
como la ceniza del cigarro que llevo
consumiendo media vida.


¿Por qué  habéis venido?

Todo está oscuro, mis ojos
están acostumbrados a este vacío,
no quiero dañarlos
con las falacias de vuestros colores,
ni con los augures de vuestros picos.
Dejadme en paz, no merezco ser esclava
de un verbo que hace eones quedó consumido,
ni tampoco ser diosa de la manta opaca que
me envuelve.

Quiero seguir entre las sombras
de las mentes claras que gritan y escupen,
letras que no llevan a ninguna parte.
Volved por donde habéis venido
llevar a otra los dones;  que en la patria
donde habito, ni se precisan, si hacen reglones.


Vosotros, pájaros perdidos del ayer
que con vuestra música me llevasteis
al mundo templado de los sueños y, después
me abandonasteis a mi suerte, cuando
las lágrimas salieron como el salitre
putrefacto de debajo de la arena, no
sois más que meros caprichos
de aquellos huérfanos de pensamiento,
parias envueltos en etiquetas desmedidas,
que valoran su henchido ego
con las plumas sobrantes de vuestros nidos;
sosteniendo entre las ramas de un árbol seco
 los pasados, los presentes y los futuros insipidos….




*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*



lunes, 3 de septiembre de 2012

YERRO...



Oleo de María Boohtiyarova


Doblegas mi voluntad ciñendo tus caricias a mis razones, marcando el camino de este laberinto donde me encuentro.
Poniendo dulzor en las retinas, te escondes en la cara oculta y oteas, hasta saciarte,  el  peculiar mundo que habito. Ese espacio anacoreta, de silencios y revelaciones.
Desatas los nudos que me sujetan a la coherencia, a la sensatez de evitar tropezar con la misma piedra, más no me resisto a tus encantos y ante tus ojos me descubro deseando…Un beso, un abrazo, una mirada, un retrato…que más da lo que ofrezcas, si mis manos estarán  ahí para soportarlo.
Me venzo todos los días pensando, que si Dios obró el milagro, quién soy yo para rechazarlo y en la misma lucha interna, caigo y me levanto, hasta romperme entera. Y así, pegando huesos, cosiendo nervios, me visto cada mañana con la piel ajada y el seso seco, suplicando desde lo más honesto  a lo más ladino olvidar el nombre del que nunca será mío.


*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos reservados*