Mojaría mis suspiros en las gotas
de tiempo que llevan tu nombre, dejaría en tus manos la expresión de un
sentimiento, no borraría jamás las palabras te quiero.
Si al mirar al cielo, viera de
nuevo como rompen las nubes, sacaría la esperanza fuera para comulgar con tu
ilusión templada y, le daría la mano al destino con la conciencia relajada al
saber que soy yo la luz de tus pasos.
Contemplo los leños como se
queman en la chimenea y, la mirada se pierde en la imaginación que refleja tu
cara. Los sonidos se amortiguan cuando desde mi boca sale como una niebla
cálida, la llamada desesperada que calma mi corazón…Tú
Todo está en silencio, si acaso
un sonido familiar y pertinente choca contra la ventana y me saca de este letargo que me confía a un
único ser.
Sonrío, es reconocible…está
empezando a llover.
*Rocío Pérez Crespo*
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muy inspirado, bien
ResponderEliminarsaludos
Gracias Omar...besos.
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