Relatos de un Resucitado

Os presento una serie de relatos escritos por un ser mágico

Disfrutadlos.

I
TIEMPO DE MANZANAS.

Era verano del 69, un año después de que los franceses tomaran La Sorbona ¿o era la Bastilla? No recuerdo. Hace tanto ya...

Después del cole fuimos a jugar a cruzar el charco, que consistía en saltar el "Escorreol" de un lado hacía el otro hasta que uno caía dentro y se ponía bonito de tarquín, y como nos reíamos cuando su madre lo templaba.

El grupo lo formábamos: Raimundo, el hijo de  Hortensia la pescatera; que tenía una tienda de frutas y verduras. Robert, hijo de Joaquín el monovero, alcalde y terrateniente del pueblo; el cual, cuando algún jornalero no quería trabajar por el sueldo que ofrecía, le mandaba por la noche a la pareja de la Guardia Civil para que se lo explicase mejor y entrara en razón. Ginesín, hijo de Ginés el loco. El Moni, hijo de Basilio el mono y, Julián el chiguito de Josefa la Pepajuana, porque en el pueblo eres hijo del progenitor de más enjundia.

Nosotros eramos la banda del Escorreol y habían otras tres. A saber: Los chochones, los Caberolas y los Sardinas. Competíamos en fútbol y en escalabrar a pedradas. 

Ese día fue el Moni quién cayó al tarquín y, al caer la tarde fuimos a que nos contara alguna historia el Tío Tremendo, mote evidente, como el mono o el loco, ya que en mi pueblo somos muy lógicos y serios en estas cosas.

El Tío Tremendo, hombre de vasta cultura, había estado en las vendimias de Francia y Jaén. Nos contaba como en Francia los señores tenían aguan de colores en el aseo y las radiografías se las hacían al óleo, o como en Jaén las olivas eran de cinco bocaos y  a las paellas les echaban camiones de arroz y sacos y sacos de conejos (luego esto se hizo real con las paellas populares) hasta que de pronto, desde el fondo de la casa se escuchaba la voz de grulla  de su esposa, tipo Lola Gaos de metro y medio, diciendole -Tío Tremendo, no le llenes de cabeza de pajaros a los sagales- El Tío Tremendo respondia: Calla Tía Pelicana que los estoy culturando.

He aquí que pasó don Fernando, el cura. Gran hombre con dos palas por manos, fe ciega y amante de preguntarnos por sorpresa sobre mandamientos, pecados capitales y demás chuflas religiosas y,que antes un error o duda, repartía hostia como panes.

Don Fernando decía que lo del árbol era un cuanto de Navidad, una patraña extranjera. Lo católico y apostólico era el belén. Él realizaba cada año uno viviente con su coro de beatas; los hombre no le gustaban para el belén. Éste lo formaban: María la coneja que hacía de burra (bordaba el papel) Mariajo la patones de vaca (daba del perfil de trasero y frente) Rosa la marimacho de San José y Angustias la muñequita de Virgen María. Para Jesús cogía al niño o niña más guapo nacido durante el año.

En esto siempre llegaba la tocapelotas de Engracia la roja y le preguntaba: Don Fernando ¿Dios padre no se mosqueará al coger una niña para hacer de Jesús? a lo que este respondia con mala leche " Dios no entiende de sexos, fíjate en los ángeles, inculta".

J.S.M.

Pd. Todos los nombres y hechos relatados son verídicos.

II

LA MARAVILLA ESPAÑOLA.

Con motivo del aniversario del nacimiento del emperador Hara Kiry de Japón, Felipe VI el Griego y un servidor.

 El 30e enero de 2015 se hermanaron el Imperio del sol naciente y el Imperio donde no se ponía el sol.

Para tal ocasión, se propuso celebrar una regata de traineras en el Parque del Retiro con una distancia de ochocientos metros. Pues nada...vamos a ello. Pistoletazo de salida y gana Japón, entrando el equipo español a una hora y veinticinco minutos. 

Ante tal humillación, Mariano "Icerman" pregunta abrumado:  Cómo ha podido ser, a lo que el responsable de la federación responde; a lo mejor ha sido la composición de la trianera, sr presidente. Vea la información:

Equipo japones: 1 jefe de remeros y 10 remeros

Equipo español: 10 jefes de remeros y un remero.

Mariano "Icerman" ante los resultados solo añade con voz meliflua: Bien, busque un grupo de expertos multidisciplinario y que arreglen el problema.

Se buscó al mejor de cada casa y, a la semana se le presenta al presidente el equipo formado por los expertos.

-Vea sr presidente. A este equipo lo denominamos "La mesa". La primera pata la componen: Cristiano Ronaldo, Messi y Butragueño (por su rapidez mental y lingüística) La segunda pata: el Luisma, el Barajas y Zapatero (por su visión más allá de la realidad) La tercera: Anita Obregón, Norma Duval y la Preysler (por su capacidad de maniobra contra los elementos) y la cuarta: Aznar, Pablo Iglesias (por ser unos adelantados a su tiempo) y ese chico tan majo que preguntó en el congreso que plan teníamos ante una invasión zombi. Carles Mulet de Compromis (por razones obvias).

- Bien, parece un buen elenco. Después de tantos esfuerzos estoy satisfecho ¡A trabajar!

El 30 de enero de 2016 se repite la carrera, pero esta vez sobre 300 metros (por si las moscas).

Pistoletazo de salida y de nuevo gana Japón, llegando la trainera española a 1 hora y 50 minutos.

-¡Por Dios! ¿Qué porras ha pasado ahora? ¿No era la composición optima?

-Parece ser que no, sr Presidente. Mira la hoja.

-Equipo japones: 1 jefe de remeros y 10 remeros.

-Equipo español: 3 jefes de remeros, 3 asesores de jefes de remeros, 4 jefes de sección y 1 remero.

-Fuera inutiles -bramó el sr Presidente y añadió- formaré mi propio grupo con 7 maravillosas y magnificas personas. Hechas a si mismas, triunfadoras y hábiles en las artes de la estrategia. Hacedoras, señores, hacedoras, joer. A ver Soraya, guapa, llamame a Conde, Rato, Blesa; Fernandez Ordoñez, Esperanza Aguirre ( la cólera de Dios) Barcenas y a la Cospe.

Trabajaron arduo y al fin la formula perfecta estuvo lista para el 30 de enero de 2017, día, mes y año en que se repite nuevamente la carrera, pero esta vez sobre 90 metros (ya no por si las moscas, pero si por si los gavilanes). 

Pistoletazo de salida y gana Japón entrando España a 2 horas y 16 minutos.

- ¡Pero que coño! ¿Qué cojones habeis hecho? - grita colerico desde su pantalla de plasma Mariano "Icerman"

-Pues verá sr Presidente le leo el balance de las traineras...

Equipo japones: 1 jefe de remeros y 10 remeros

Equipo español:  2 jefes de remeros, 2 asesores de jefe de remeros, 2 auditores de calidad, 2 supervisores de los auditores, 1 analista de remero, 1 experto en tecnología remeril, 2 jefes de sección y 1 remero.

-Sorayaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, buscamé a los resposables del departamento i + d + rrhh +ie + ia

Soraya aturullada llama a los del departamento que en menos de dos minutos estaban cuadrados delante del Icerman.

-Quiero de ustedes que me analicen los problemas y me den una solución. Busquen hasta la liendre en cada pelo si fuese necesario ¿entendidoooooo?

Tres días después llega la respuesta del departamento i +d + rrhh + ie +ia

Analisis:

1º Los japoneses van hasta el culo de anabolizantes esteroideos.

2º El remero español es retroactivo en lugar de proactivo, o sea, un flojeras del copón y además, sin ninguna implicación en el proyecto ni en la patria.

Por culpa de tipos como este, España no es una gran potencia.

Solución:

Despedir al remero y contratar otro que reúna las cualidades e implicaciones del proyecto.

(Basada en hechos reales)

III

ESA SENSACIÓN

Escuchen vuestras mercedes, mi nombre es Miguel y nací un tibio 29 de septiembre del año de nuestro Señor de 1547 y, nací solo, ya que mi madre había salido a pedir perejil a la María la del patio de atrás. Por esa razón, siempre sentí un vacío sentimental dentro del pecho. Vagué sin rumbo hasta que una pareja de tortugas me adoptaron y, a pesar de su interés y sus cuidados, no conseguí aclimatarme. Supongo que al ser animales de sangre fría no conseguían transmitirme la sensación que yo añoraba.

Seguí vagando y un buen día, al pasar por Mesina, vi a una escuadra de navíos. Me dirigí hacia ellos y después de saludar pregunte interesado: ¿Está el encargado?

Una voz profunda al fondo de la barra me contestó de inmediato

-Soy yo. Capitán Diego de Urbina ¿Qué se le ofrece?

- Deseo embarcar y encontrar esa sensación que busco en el cálido Oriente.

Así lo hice. Pero al pasar por Naupacto se lió un fijostio del copón entre templarios y sarracenos; con tan mala fortuna que un arcabuzazo me jodió la mano y para aliviar el dolor intenso y desgarrado se me ocurrió , con muy mala fortuna, meterla en un recipiente que contenía aceite hirviendo. Se me quedó un muñón como el culo de un babuino.

El consorcio de seguros de Bucaneros y Marinos me indemnizó y, por ello, disfruté de los placeres del cálido Oriente. Pero tampoco era esa la sensación que añoraba y sin más regrese de nuevo a tierras patrias.

Anduve y anduve hasta recalar en un bonito pueblo. Al llegar a la plaza central, contemplé a tres ancianos y a dos lagartijas que tomaban el sol del mediodía plácidamente. Me dirigí primero a los ancianos por respeto a los mayores y les pregunté ¿Qué lugar es este, amables lugareños?

- Un lugar de la Mancha de cuyo nombre nadie quiere acordarse...

Bonito si es, pero largo -pensé para mi- y continué mi marcha. Justo fue que al doblar la esquina me encontré con una lozana muchacha de ojos traviesos y juguetones, carnosos labios, turgentes pechos y andares garbosos. Llevaba con gracia, apoyada en la cintura, un cántaro de agua clara.

- ¡Oh que espanto!- exclamo la muchacha al ver mi muñón- ¿cómo os hicisteis eso, caballero?

-En tierras infieles -respondí- y por cierto ¿cual es vuestro nombre, bella doncella?

-Mi nombre es Dusinea del Goloso -respondió ella.

-¿Y podría cobijarme en su seno? -pregunté yo.

- No sé ¿y por las noches que harás?

- Ha tiempo que ando barruntando escribir las hazañas de un ingenioso hidalgo y lo haría por las noches.

-Está bien, si no dais mucho polculo, podéis cobijaros bajo mi seno.

Así lo hice y desde entonces me encuentro raro. Creo que encontré la sensación que tanto buscaba desde que nací. La llamaré tibieza y a partir de hoy, en lugar de ser llamado Miguel de Dosguantes, mi nombre será El manco del espanto, en honor  a mi amada Dusinea del Goloso. 

Julián Sanchez Martinez.