Te siento en los límites de la realidad, y me provoca.
Acompaño tu ternura con más ternura y hago acopio de fortaleza. No me rindo aunque no tenga ni idea que sientes, que siento…quién eres, quien soy.
No hay destellos que enmascaren nuestro cielo, lo que es, se ve en la distancia y en la cercanía…me gusta, me aporta confianza, se llenan mis venas de seguridad.
Nos podremos soñar cuantas veces queramos y llenarnos de besos silentes salidos de las entrañas…seremos más, seremos menos. Pero seremos de algún modo.
Confieso que tocar tu piel sería un deleite, o quizá, sólo la fantasía de ese abismo de extraña ignorancia que me estimula. Serán esos pozos de pensamientos callados o la fatiga de intentar comprender tanta duda.
Tenemos un futuro que siendo espeso, es plausible de un pretérito vivo y querido con toques de penas e incertidumbres, depende de nosotros, sólo de nosotros.
En esta tarde helada que va tocando a su fin, como es mi costumbre…te espero para no echarte tanto de menos.
*Rocío Pérez Crespo*
*Derechos Reservados*Acompaño tu ternura con más ternura y hago acopio de fortaleza. No me rindo aunque no tenga ni idea que sientes, que siento…quién eres, quien soy.
No hay destellos que enmascaren nuestro cielo, lo que es, se ve en la distancia y en la cercanía…me gusta, me aporta confianza, se llenan mis venas de seguridad.
Nos podremos soñar cuantas veces queramos y llenarnos de besos silentes salidos de las entrañas…seremos más, seremos menos. Pero seremos de algún modo.
Confieso que tocar tu piel sería un deleite, o quizá, sólo la fantasía de ese abismo de extraña ignorancia que me estimula. Serán esos pozos de pensamientos callados o la fatiga de intentar comprender tanta duda.
Tenemos un futuro que siendo espeso, es plausible de un pretérito vivo y querido con toques de penas e incertidumbres, depende de nosotros, sólo de nosotros.
En esta tarde helada que va tocando a su fin, como es mi costumbre…te espero para no echarte tanto de menos.
*Rocío Pérez Crespo*
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