Tu mirada de miel me habla de
amores, tu silente verbo de poesías florecidas en las profundidades del
sentimiento.
Besos y versos, callados,
discretos. Esperando en el umbral de la conciencia el último paso a la realidad
de la piel.
Ya no queda soporte donde
reposar nuestras retinas, sencillamente en tus ojos dejo reflejar los míos,
donde, una vieja canción hace su pase para mí…
“Pero niña, tu risa es la magia de los rocanroles”
*Rocío Pérez Crespo*
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