Para Miguel.
A este lado del mundo, también
llega la música. Cerca con sus notas los Jacarandás que permanecen estáticos en
el patio, esperando sus hojas malvas en otra primavera de cálida efervescencia.
Escucho la melodía apostada en el níveo rincón de este invierno absoluto y,
espero, al igual que ellos, que el tibio esplendor me alcance de lleno.
Porque a este lado del mundo,
también hay vida. Sublime y hermosa vida que recorre el infinito como una brisa
suave que golpea amores. No hay aristas por donde se cuele la promesa, ni pecado
ni memoria que deje una mancha de rencor en la pared. Solo la senda trazada
donde todo se adivina con otra luminiscencia, pegada a la serena paciencia de
unas ramas y una sola raíz.
Desde este blanco cobijo te
intuyo y, solo acierto a decir: toca el cielo y llévame contigo.
*Rocío Pérez Crespo*
de una calidad impecable
ResponderEliminarsaludos
Muchas gracias Omar...un saludo enorme.
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